LA LAGUNA (La Opinión) "Serán los representantes de la ciudad y la primera imagen que los turistas se lleven de ella". Esta fue la frase con la que el alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, dio la bienvenida ayer a los 93 nuevos conductores de taxis.
El salón de plenos del Ayuntamiento acogió ayer el acto de entrega de los permisos municipales de conducción de autotaxi a 93 de los 96 laguneros que se presentaron a las pruebas de selección el pasado 27 de diciembre. Representantes de todos los partidos políticos de la Corporación acudieron a la cita para entregar en mano los carnés a los nuevos conductores, así como el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, José Alberto Díaz, y el propio alcalde.
Los miembros del tribunal y los representantes de las distintas asociaciones del taxi de La Laguna también estuvieron presentes. Estos últimos colaboraron en todo el proceso selectivo, del que tan solo quedaron excluidos tres candidatos. "Las pruebas fueron bastante fáciles, pero había preguntas para las que era necesario recibir clases", explicó Ayoze Brito, uno de los futuros taxistas. Entre todos los nuevos permisos, ocho fueron para mujeres. Para Carmen Martín, "desde hace dos años ya no hay machismo en este mundillo".
Todos los que se presentaron se habían formado previamente en un curso de 30 horas de duración, en el que debían aprender conceptos relacionados con la seguridad vial, los límites de consumo de alcohol, legislación aplicable e historia y conocimiento del municipio. Las distintas temáticas fueron impartidas por profesionales de cada sector: inspectores del cuerpo de la Policía Local, técnicos del Cabildo de Tenerife y psicólogos.
Casi todos los nuevos conductores trabajarán para alguno de los 361 taxistas con licencia que en este momento existen en La Laguna. En este caso, la situación es mejor que en Santa Cruz de Tenerife. La cantidad de licencias para la conducción de autotaxis propios supera es de 1.087 en la capital tinerfeña, muy por encima de la tasa media nacional por habitante. Por ello, el Ayuntamiento chicharrero prevé recortar de entrada 60. En La Laguna, sin embargo, no hay exceso de vehículos.
Yeray Doni, uno de los pocos taxistas aprobados que dispondrá de su propio vehículo, afirmó que "en La Laguna la demanda de permisos es mucho mayor que en la capital, sobre todo ahora que hay mucha gente en paro. Sin embargo, allí se conceden muchos más carnés y no hay trabajo para tanta gente, mientras aquí no ocurre no existe ese problema".
Por otro lado, Aguere cuenta con las ventajas de tener un mayor número de paradas y una actividad de ocio nocturno que favorecen esta actividad. De ahí que, ante la falta de trabajo, muchos taxistas de la capital acudan al aeropuerto de Los Rodeos para sumar clientes. Según palabras de los profesores que enseñaron la legislación a estos conductores, "se está trabajando por solucionar este problema". Los taxistas de una y otra ciudad tienen prohibido rebasar las fronteras municipales para recoger clientes salvo en el Puerto y el aeropuerto.
Otro de los problemas con los que cuentan estos profesionales en La Laguna es la inseguridad a la que se enfrentan los taxistas cuando trabajan de noche. Este es uno de los puntos más temidos por otro de los aprobados, Alán Álvarez: "El taxi es lo más barato cuando sales de fiesta, pero para nosotros es peligroso".
El salón de plenos del Ayuntamiento acogió ayer el acto de entrega de los permisos municipales de conducción de autotaxi a 93 de los 96 laguneros que se presentaron a las pruebas de selección el pasado 27 de diciembre. Representantes de todos los partidos políticos de la Corporación acudieron a la cita para entregar en mano los carnés a los nuevos conductores, así como el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, José Alberto Díaz, y el propio alcalde.
Los miembros del tribunal y los representantes de las distintas asociaciones del taxi de La Laguna también estuvieron presentes. Estos últimos colaboraron en todo el proceso selectivo, del que tan solo quedaron excluidos tres candidatos. "Las pruebas fueron bastante fáciles, pero había preguntas para las que era necesario recibir clases", explicó Ayoze Brito, uno de los futuros taxistas. Entre todos los nuevos permisos, ocho fueron para mujeres. Para Carmen Martín, "desde hace dos años ya no hay machismo en este mundillo".
Todos los que se presentaron se habían formado previamente en un curso de 30 horas de duración, en el que debían aprender conceptos relacionados con la seguridad vial, los límites de consumo de alcohol, legislación aplicable e historia y conocimiento del municipio. Las distintas temáticas fueron impartidas por profesionales de cada sector: inspectores del cuerpo de la Policía Local, técnicos del Cabildo de Tenerife y psicólogos.
Casi todos los nuevos conductores trabajarán para alguno de los 361 taxistas con licencia que en este momento existen en La Laguna. En este caso, la situación es mejor que en Santa Cruz de Tenerife. La cantidad de licencias para la conducción de autotaxis propios supera es de 1.087 en la capital tinerfeña, muy por encima de la tasa media nacional por habitante. Por ello, el Ayuntamiento chicharrero prevé recortar de entrada 60. En La Laguna, sin embargo, no hay exceso de vehículos.
Yeray Doni, uno de los pocos taxistas aprobados que dispondrá de su propio vehículo, afirmó que "en La Laguna la demanda de permisos es mucho mayor que en la capital, sobre todo ahora que hay mucha gente en paro. Sin embargo, allí se conceden muchos más carnés y no hay trabajo para tanta gente, mientras aquí no ocurre no existe ese problema".
Por otro lado, Aguere cuenta con las ventajas de tener un mayor número de paradas y una actividad de ocio nocturno que favorecen esta actividad. De ahí que, ante la falta de trabajo, muchos taxistas de la capital acudan al aeropuerto de Los Rodeos para sumar clientes. Según palabras de los profesores que enseñaron la legislación a estos conductores, "se está trabajando por solucionar este problema". Los taxistas de una y otra ciudad tienen prohibido rebasar las fronteras municipales para recoger clientes salvo en el Puerto y el aeropuerto.
Otro de los problemas con los que cuentan estos profesionales en La Laguna es la inseguridad a la que se enfrentan los taxistas cuando trabajan de noche. Este es uno de los puntos más temidos por otro de los aprobados, Alán Álvarez: "El taxi es lo más barato cuando sales de fiesta, pero para nosotros es peligroso".
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