LA LAGUNA (La Opinión)
Princesas infantiles, romanas, del siglo XVIII y contemporáneas. Todas
ellas protagonizaron la Cabalgata de Carrozas de las Fiestas de Tejina
que tuvo lugar anoche en el casco del pueblo. Aunque el desfile suele
ser de lo más variopinto, parece ser que en esta edición vecinos y
diseñadores se pusieron de acuerdo para hacer de las calles de Tejina un
auténtico palacio.
La carroza de Juanito, uno de los tejineros
infalibles en este evento, representó un castillo romano con sus reyes
como protagonistas. Lo más llamativo fue el puente levadizo que daba
acceso al salón central y que varios soldados manejaban a su antojo para
permitir el paso a través del foso.
Josué eligió un palacio
francés del siglo XVIII para inspirar su carroza, con balcón y
escalinatas incluidos. Sus moradores, caracterizados con las pelucas
blancas de tirabuzones, bailaron al son de Las cuatro estaciones de
Vivaldi durante todo el recorrido.
Néstor, otro de los vecinos,
se desmarcó de la temática habitual con una carroza que representaba un
mundo de monstruos y dragones. Conducía a ellos un gran oso polar que
movía la cabeza de lado a lado arrastrando un trineo.
La Reina
Infantil de las Fiestas y su corte abrieron el paso, todos ellos
vestidos de príncipes. El diseñador José Hernández, conocido como Soya,
fue el encargado de elaborar este año el vehículo engalanado de la Reina
y sus damas de honor. “Me he inspirado en nuestra fiesta más conocida,
los Corazones, para hacer la carroza más bonita y especial en la que he
trabajado en 15 años”, contaba emocionado. Para Candelaria González,
vecina de Tejina, esta carroza es siempre “la más vistosa”.
Además,
la comparsa local Axé Bahía y las bandas municipal y la de cornetas y
tambores de Tejina animaron un desfile donde no faltaron los personajes
de Disney. Las carrozas volverán a salir el próximo domingo en la
Batalla de las Flores para amortizar los meses de trabajo de sus
creadores.
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