LA LAGUNA (La Opinión)
Un total de 35 alumnos del CEIP Las Mercedes se han quedado este curso
sin plaza en el comedor del colegio. De las más de 200 solicitudes que
se formalizaron para este servicio, la Consejería de Educación del
Gobierno de Canarias tan solo ha concedido 170 plazas, ya que por falta
de presupuesto prescindirá del personal extra que, junto con la empresa
que presta el catering, se encargaba hasta ahora del cuidado de los
menores. Ante esta situación, casi una veintena de padres de alumnos y
miembros del AMPA de este colegio lagunero se manifestaron ayer ante la
sede de la Conserjería de la capital en busca de una solución, ya que su
situación laboral no les permite hacerse cargo de los niños a la hora
del almuerzo.
La escasez de plazas para el servicio de comedor en
el CEIP Las Mercedes es un problema que existe desde hace varios años y
que, hasta el presente, se había solucionado con la contratación por
parte de la Conserjería –y ante la insistencia de la directiva del
colegio– de dos educadores que, durante el tiempo que dura el servicio
de comedor, servían de refuerzo al personal de la empresa contratada
para dar de comer a los estudiantes. Sin embargo, para este curso
Educación ha eliminado esta posibilidad ante la falta de presupuesto.
La
Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del colegio asegura
que, a pesar de que la demanda sigue siendo la misma que en años
anteriores, el problema se ha agravado en esta ocasión porque, ante la
crisis económica, se les ha concedido plaza directa a aquellos niños sin
recursos para garantizarles una alimentación equilibrada al menos una
vez al día. De este modo, muchos de los alumnos que tradicionalmente se
han quedado a comer en el colegio porque los padres no podían hacerse
cargo de ellos no han obtenido plaza.
Iluminada Amador, miembro de
la AMPA y madre de uno de los alumnos, explicó que "entre los padres de
esos 35 niños la mayoría trabajan hasta la tarde o están en paro y en
busca de empleo, por lo que necesitan tiempo para formarse y encontrar
trabajo". Según Amador, "esto supone que haya parejas que, ante la
imposibilidad de conciliar la vida laboral y la vida familiar, se hayan
visto obligadas a abandonar su puesto de trabajo y recurrir a las ayudas
de las administraciones, con lo que esto significa en tiempos de
crisis".
El horario de comedor en el CEIP Las Mercedes comienza a
las 12:30 en los meses de junio y septiembre, y a las 13:30 horas el
resto del año, prolongándose durante una hora aproximadamente. A
continuación, comienzan las actividades extraescolares, que duran hasta
las 16:00 horas. Esto supone que los niños que han quedado excluidos del
servicio de almuerzo no podrán acudir además a las clases que se
ofrecen una vez finalizado el horario lectivo.
Situación crítica
"Prácticamente ningún padre sale de trabajar antes de las cuatro de la tarde, por lo que tenemos que depender de familiares o amigos que se hagan cargo de nuestros hijos a diario y no todo el mundo puede", asegura Amador, para añadir que "es negativo que los niños no puedan asistir a las actividades extrascolares, porque es una forma de despejarse después de las clases y relacionarse con niños de diferentes edades".
La
junta directiva del CEIP Las Mercedes se ve incapacitada para responder
ante esta situación, ya que cualquier tipo de medida que se tome en el
centro debe partir de la Consejería de Educación. Sin embargo, la
portavoz del AMPA del colegio lagunero asegura que "este mismo problema
se está produciendo en otros centros".
Los padres de los alumnos
que ayer se manifestaron esperan que la concentración sirva para que la
Conserjería tome cartas en el asunto. "La solución que pedimos es la
misma que se ha tomado otros años, pues el coste que supone una empleada
más lo cubrimos entre todos los padres a través de los impuestos que
pagamos, siempre que podamos trabajar", concluyó Iluminada.
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